Iniciamos el mes de octubre dedicado mundialmente a despertar el Espíritu Misionero en los fieles, con gestos de solidaridad hacia los necesitados; se caracteriza por una atención particular a las diversas realidades pastorales.
El Papa Francisco, para la Jornada Mundial de las Misiones de este año ha elegido el tema de la parábola evangélica del banquete nupcial (cf. Mt 22,1-14):
“Después de que los invitados rechazaron la invitación, el rey, protagonista del relato, dice a sus siervos: «Salgan a los cruces de los caminos e inviten a todos los que encuentren» (v. 9). Reflexionando sobre esta palabra clave, en el contexto de la parábola y de la vida de Jesús, podemos destacar algunos aspectos importantes de la evangelización, los cuales resultan particularmente actuales para todos nosotros, discípulos-misioneros de Cristo, en esta fase final del itinerario sinodal que, de acuerdo con el lema “Comunión, participación, misión”, deberá relanzar a la Iglesia hacia su compromiso prioritario, es decir, el anuncio del Evangelio en el mundo contemporáneo.
1. “¡Vayan e inviten!”. La misión como un incansable ir e invitar a la fiesta del Señor
2. Al banquete. La perspectiva escatológica y eucarística de la misión de Cristo y de la Iglesia
3. “Todos”. La misión universal de los discípulos de Cristo y la Iglesia completamente sinodal-misionera
Y tu como ayudas a las misiones…